El estilo de vida actual, la falta de tiempo y las viviendas de dimensiones más reducidas nos impiden, en ocasiones, mantener nuestra casa bien organizada. Y no se trata únicamente de una cuestión estética, el desorden afecta directamente a nuestra salud. Por ello, buscar una solución será de gran ayuda también para nuestro bienestar emocional. Te contamos cómo organizar una casa desordenada con los 9 mejores trucos y consejos, realmente útiles y sencillos, para que disfrutes de tu casa en armonía.
1. Tira aquello que no utilices
Incluso puedes venderlo, donarlo o regalarlo a alguien que le puede dar una utilidad real. Deshacerte, de un modo u otro, de aquello que hace tiempo que no usas, te servirá para liberar espacio y mantener tu casa más organizada y despejada, por lo que además te resultará más sencillo realizar las tareas de limpieza cotidianas.
Dedica un tiempo prudencial a llevar a cabo una primera selección de aquellas piezas, accesorios de cocina o baño, ropa o armario zapatos que realmente hace tiempo que no tienen utilidad.
Aunque puede costar deshacerse de según qué cosas, en cuanto hayas realizado una primera selección, podrás analizar si realmente necesitas estos objetos o no y así tomar la decisión definitiva.
Ten en cuenta la regla 80/20, una de las más importantes para conseguir cómo organizar una casa desordenada, en la que se indica que tan solo utilizamos un 20% de las cosas que tenemos. El mejor punto de partida que te servirá para darte cuenta de que estamos rodeadas de cosas que seguramente no necesitamos.
2. Un lugar para cada cosa y cada cosa en su lugar
Cada pieza u objeto tiene un lugar predeterminado. Procura asignar un lugar específico para cada elemento e intenta que se mantenga en sus sitio.
Si, por algún motivo, ciertos objetos tienen que estar en una estancia distinta a la habitual, no esperes a recogerlo y recolocarlo demasiado tiempo, ya que acabarás acumulando cosas innecesarias en lugares que no corresponden y, con el paso del tiempo, será más complicado y costoso volver a organizarlo.
3. Cajones compartimentados, los grandes aliados para organizar una casa desordenada
Los cajones compartimentados correctamente ordenados, ya sea en la cocina, el baño, el salón o el dormitorio son un elemento clave que te ayudarán en la ardua tarea de cómo organizar una casa desordenada.
Procura que el caos exterior no se apodere del interior de los cajones utilizando bandejas y separadores para aprovechar al máximo el espacio disponible, que esté todo a la vista y sea fácilmente accesible.
Si cuentas con el espacio suficiente, procura colocar en el interior de los cajones el mismo tipo de elemento. Aunque puede parecer muy obvio, utiliza el cajón para las mantelerías, única y exclusivamente para los manteles y servilletas, en el de las toallas, solo las toallas perfectamente dobladas, etc.
Si añades otras piezas de índole distinta te costará encontrar lo que necesites en cada momento, por lo que perderás el enfoque de la organización.
Elige los organizadores de cajones que prefieras, de madera, plástico, metálicos, transparentes… y utilízalos para guardar la ropa interior y los calcetines bien ordenados en los cajones superiores de una cómoda o sifonier, en el dormitorio, por ejemplo.
Para el cuarto de baño también resultan muy útiles, ya que puedes distribuir los algodones e utensilios que utilices a diario, bien organizados sobre la encimera del lavabo y aquellos que no uses tan a menudo, en uno de los armarios.
4. Cocina siempre impecable
La cocina es una de las estancias en las que más se acumula el desorden. Esto se debe a que en ella pasamos gran tiempo de nuestra vida en casa e utilizamos muchos elementos para cocinar o comer, por lo que devolverlos al sitio que corresponde, tras haberlos utilizado, será fundamental para lograr que el caos no se apodere de este espacio.
Ayúdate de accesorios que te permitan facilitar esta tarea mediante el uso de especieros para almacenar correctamente las especias, tarros de cristal transparentes para visualizar rápidamente que hay en el interior y compartimentos para los cubiertos, por ejemplo.
Diseñar los interiores de cajones y armarios con separadores o bandejas rotatorias o extraíbles también te permitirá encontrar y coger lo que necesites, sin tener que revolverlo todo.
Además, tal y como hemos comentado en el primer punto, no es necesario que tengas una colección de 5 sartenes o cazos distintos del mismo tamaño. Tira aquello que no utilices y guarda solo lo necesario o lo más nuevo.
El espacio de despensa en la cocina es también una fuente de desorden. Para evitar que se te acumulen los paquetes de harina, azúcar, sal arroz, café, etc., procura utilizar tarros transparentes para cada ingrediente. Compra solo lo que se haya terminado o veas que ya queda poco y colócalo en el tarro que le corresponde en cuanto llegues del supermercado. Así evitarás la acumulación y posibles caducidades de los alimentos.
5. Despeja las superficies conflictivas
Algunas piezas, como la mesa de comedor, la repisa del recibidor o la encimera de la cocina son especialmente susceptibles a que las utilicemos para colocar montones de objetos.
Procura despejarlas cada noche, antes de irte a dormir y coloca cada cosa en su sitio. Hazlo de forma rutinaria, para evitar que pasen los días y se acumulen en ellas, objetos que no deben estar ahí.
Si colocas alguna composición decorativa o floral en el centro de la mesa de comedor, por ejemplo, podrás concienciarte involuntariamente de que no se trata de una superficie de almacenaje, por lo que el espacio se verá siempre más ordenado.
6. Cómo ordenar la habitación de los niños (y mantenerla ordenada)
La habitación de los niños es una de las más difíciles de mantener en orden. No por nada, los más pequeños de la casa parecen expertos en desordenar. La forma más sencilla es habituarlos al orden y la limpieza, pero puede que necesiten ayuda.
La utilización de cajas, estantes y otros métodos de organización se puede aplicar también a la habitación de los niños. De esta forma, es más fácil que recojan por sí mismos su ropa o sus juguetes cada día, y que se sientan motivados.
7. Cómo organizar una casa desordenada: el dormitorio
Dejar la ropa sobre la cama o una butaca en el dormitorio cuando volvemos de trabajar es una práctica muy habitual que puede convertir nuestra habitación en un espacio desapacible y desordenado.
Acostúmbrate a colgarlo de nuevo en el armario, doblarlo en un cajón o ponerlo en el cesto de la ropa sucia, en cuanto te hayas desvestido.
Para que te resulte más sencillo procura que el interior de tu armario esté bien planificado, con las barras, estantes, cajones y accesorios de organización que precises, en función de tus necesidades y costumbres.
Analiza si prefieres colgar la ropa en perchas o doblarla y guardarla en cajones o estantes, si necesitas más espacio destinado a los pantalones y las chaquetas y procura que la ropa esté bien colocada y puedas cogerla fácilmente cuando la necesites, sin que se te desmonte lo que tienes alrededor.
Para conseguirlo y disfrutar de un armario o vestidor perfectamente organizado, también tendrás que hacer limpieza de ropa, por lo menos dos veces al año, aprovechando el cambio de ropa de temporada.
8. Salones más despejados
El salón es una de las estancias en las que acumulamos más cosas innecesarias o de forma errónea.
Para mantener el orden en este espacio utiliza cestas en las que puedes colocar distintos objetos siempre de forma ordenada. No mezcles elementos distintos en el mismo cesto porque si necesitas encontrar alguna cosa concreta tendrás que revolverlo todo hasta localizarlo.
Organizarlo de forma inteligente, teniendo en cuenta la frecuencia de tiempo con la que utilices cada cosa será de gran ayuda para mantener el salón más agradables y bien despejado.
9. Ordenar una casa desordenada: no olvides otras estancias
Hemos hablado del salón, la cocina, las habitaciones de los peques y el dormitorio. Pero si quieres mantener tu casa ordenada, no puedes olvidarte del baño y otras estancias.
El baño es un gran candidato al caos: cremas, cepillos, maquillaje, secador… En esta habitación es casi muy importante el uso de baldas y cajones compartimentados para mantener una sensación de orden.
De forma parecida, puedes aplicar estas ideas para el jardín, garaje y otros lugares de la casa. ¡Conseguirás un ambiente organizado y tranquilo en todo tu casa fácilmente!
Ponte manos a la obra y disfruta de una casa más serena y acogedora, perfectamente organizada. Podrás ahorrar tiempo y dinero y vivir de forma más relajada y estable.
Ahora que ya sabes cómo organizar una casa desordenada, ¿te apuntas al orden en casa?