Los colchones son la base de un buen descanso. Después de elegir aquel que se adapte a ti y te ofrezca el confort que necesitas, no te olvides de él. Aprende ahora cómo limpiar un colchón, y empieza a cuidar de toda tu cama como lo haces del resto de tu vivienda. ¡Notarás la diferencia!
Guía para saber cómo limpiar un colchón fácilmente en tu casa
Permítenos que te hagamos una pregunta algo personal. ¿Estás realmente a gusto con tu colchón? Si dudas, quizás sea el momento para cambiarlo por un tipo de colchón más adecuado a tus necesidades. ¿Sabes que no te favorece nada dormir en uno que supere los 10 años?
Si la respuesta es afirmativa, te explicamos a continuación cómo limpiar un colchón doméstico
Los colchones con medidas más anchas, de hasta 180 cm o 2 m, te facilitarán un plus de confort.
5 pasos imprescindibles para la limpieza de un colchón con detergente
- Quita la sábana bajera y ventila tu colchón unos minutos.
- Limpia en profundidad todo el polvo acumulado. Debajo de tu cama y, también, sobre el propio colchón.
- Usa un producto específico para la limpieza en seco de tejidos. Puedes hacer uno alternativo casero tu misma. Mezcla a fondo un chorrito de tu detergente habitual o jabón neutro con un poquito de agua. Tienes que conseguir una gran cantidad de espuma, similar a cuando montas claras a punto de nieve y empiezan a espesar.
- Emplea esa espuma (solo la espuma) para ir limpiando, poco a poco, la superficie del colchón con un paño u otro material seco.
- Deja que actúe durante un tiempo prolongado. No hagas la cama.
Es recomendable limpiar los colchones en seco. No uses el resto del agua porque introducirías humedad.
5 claves para la limpieza de los colchones con bicarbonato
- Retira la ropa de cama.
- Quita completamente el polvo del colchón.
- Extiende una fina capa de bicarbonato por la superficie del mismo. Deja actuar hasta la noche.
- Retira el bicarbonato.
- Rocía ligeramente la superficie con vinagre blanco. Deja que seque bien antes de hacer la cama.
Y después del aseo del colchón, ¿qué puedes hacer para seguir cuidándolo?
Hay hábitos muy sencillos que no te quitarán mucho tiempo.
- Abre la ventana y ventila diariamente tu dormitorio. ¡Son suficientes unos 10 minutos!
- Cambia tu rutina para hacer la cama: retira todos los textiles, espera a que se haya aireado el colchón y haz la cama.
- Sacude almohadas y colcha.
- Durante el día deja que entre la mayor cantidad de luz natural posible. El sol es lo mejor contra la humedad y el moho.
- Cambia semanalmente la ropa de cama.
- Dale la vuelta a tu colchón o cambia su posición. Lee las indicaciones de la etiqueta o recomendaciones del fabricante. Sabrás cada cuánto tiempo es necesario voltearlo o situar la zona de la cabecera a los pies. Suele ser dos veces al año o con cada cambio de estación.
- Vístelo con una funda o protector de colchón. Si es anti ácaros para evitar alergias al polvo, impermeable para proteger frente a líquidos no deseados y acolchado para garantizar un mayor confort a tu espalda, mucho mejor, ¿no crees? Y no te olvides de lavarlo.
Mientras que el protector de colchón cubre la parte superior del mismo y los cuatro laterales, una funda de colchón lo envuelve completamente.
Ahora que sabes cómo limpiar un colchón enriquece tu descanso cuidando cada detalle de tu dormitorio. Con ropa de cama con tejidos de tacto suave o almohadas con la firmeza que necesitas. Todo cuenta para que tengas un sueño reparador. ¡Adapta la habitación más personal de tu casa para que satisfaga tus gustos!