¿Buscas darle a tu casa un punto de calidez y naturalidad sin perder el toque moderno? Apuesta por el estilo rústico industrial, una mezcla que le dará equilibrio y personalidad a cada rincón de tu hogar. Para que puedas aplicarlo de manera sencilla, hoy compartimos contigo algunos consejos. Toma nota.
El estilo rústico industrial será tu nuevo estilo decorativo favorito: ¡te contamos cómo aplicarlo en casa!
Estilo rústico industrial: la fusión de dos estilos
El estilo rústico industrial siempre sorprende. ¿Una mezcla entre lo natural y lo artificial? ¿Quién iba a decir que se complementarían tan bien? Aunque parecen dos tipos de decoración antagónicos, la verdad es que encajan muy bien entre sí, siempre y cuando tengas en cuenta algunas recomendaciones. Pero antes, repasamos brevemente en qué consiste este estilo de decoración moderno que puedes aplicar a tu casa.
¿En qué consiste el estilo industrial?
Los orígenes del estilo industrial se remontan a la desindustrialización de grandes ciudades, como Nueva York, a mediados del siglo XX, cuando las fábricas o almacenes abandonados se transformaron en espacios residenciales.
Algunas de las características de esos espacios, cada vez más modernizados, son:
- Todo a la vista: ladrillos, tuberías… Una pequeña exposición modernizada de lo que una vez fue una fábrica.
- Grandes ventanas y techos altos. Eran necesarias, ya que se ahorraba luz y se necesitaba espacio.
- Techo con vigas a la vista, ahora una cuestión de decoración.
- Luces grandes y destacables, con bombillas cálidas y anchas.
- Suelos de hormigón, para resistir el peso de la maquinaria.
¿En qué consiste el estilo rústico?
El estilo rústico surge fuera de la ciudad, en zonas de campo y montaña. Los materiales naturales, los espacios amplios y los muebles con una apariencia desgastada generan una sensación de calidez y de confort que te abraza cuando cruzas el umbral de la puerta.
Las características para conseguir una decoración rústica son:
- Madera natural: tanto en las paredes o suelos, como en las puertas, techos y muebles. Puede ser de color más oscuro o claro.
- Piezas antiguas: como baúles de aspecto envejecido, sillas hechas en madera o jarrones decorativos.
- Fibras naturales: el algodón, el lino o la lana son algunos de los materiales que predominan en el estilo rústico.
- Colores neutros: blancos o beige que combinan con la madera y crean espacios muy agradables.
Estilo rústico industrial: materiales y colores
De la combinación del estilo industrial y del rústico, nace el estilo rústico industrial. Así, se combinan los materiales más propios de las fábricas con otros que recordaban a las casas campestres. Estos son algunos de sus elementos básicos:
- Madera. Oscura, gris, sin tratar, al natural.
- Metales. Hierro, acero inoxidable, detalles dorados.
- Ladrillos. Pueden ser pintados de algún color neutro, como gris y blanco, o bien al natural.
- Telas, como la piel, el cuero o el algodón. También cuerdas, como complementos del estilo rústico.
- Hormigón, un material muy adecuado para complementar este estilo, aplicados en suelos y paredes.
El estilo rústico industrial se basa en distintas texturas, pero también es un estilo sencillo y simple. Solo debes encontrar el equilibrio entre lo elemental y lo complementario.
Los colores usados en el estilo rústico industrial son, principalmente, las gamas de los blancos, grises, beiges y negro. Sobre todo, colores neutros.
Dependiendo de si quieres crear una estancia más o menos cálida, deberás usar una u otra paleta de colores:
- Usa colores más oscuros como base para crear un espacio más elegante e industrial.
- Decántate por otros más claros como base para una estancia más rústica. Puedes usar el negro para crear contraste en algunos detalles como, por ejemplo, con muebles auxiliares, como una mesa de centro o la iluminación a base de focos.
Cómo aplicar el estilo rústico industrial en tu casa
Puede que te preguntes, ¿cómo puedo aplicar el estilo rústico industrial en mi casa? Vamos a ver algunos consejos que pueden resultarte útiles:
- Un mobiliario sencillo es clave para este estilo, sin formas extravagantes ni grandes muebles clásicos. Los muebles rústicos industriales de líneas simples cuadran a la perfección.
- Usa cajas de madera y palets para crear estantes y mesas de centro, o como zona de almacenaje para mantas y cojines, que se vayan a usar en la misma estancia.
- Reutiliza algunas piezas vintage, si las tienes. Aquellas que creas que ya no sirven, restáuralas, envejécelas o píntalas ¡y añádelas a tu casa de estilo rústico industrial!
- En cuanto a la iluminación, todo es a lo grande: grandes bombillas cálidas, sostenidas por cuerdas, grandes lámparas de metal, focos de cine o flexos…
- Como hemos dicho antes, el color también juega un papel importante en este tipo de decoración. Es preferible una base neutra para obtener mejores resultados.
- Evita usar materiales pesados en los tejidos y apuesta por un material ligero, para lograr un ambiente más acogedor.
La mayoría de las casas de estilo rústico industrial suelen ser naves abandonadas, ¡pero eso no significa que no puedas transformar la tuya! Atrévete a combinar ambos estilos y consigue un espacio moderno y lleno de personalidad.
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